jueves, 9 de noviembre de 2017

Tres momentos

Mi deseo es caminar las calles sin nunca tocar el final.
Mi deseo es arropar ovejas en el corazón de la tarde.
Mi deseo es escuchar las tonadas de otra civilización.

Mi miedo es descubrir que no hay realidad ni calle.
Mi miedo es conocer un abrazo del que no pueda escapar.
Mi miedo es que una sirena me conduzca al infierno.

La verdad 
–mientras camino– 
sé que soy yo la sirena 
y que detrás de mí, y por delante, 
caminamos, ovejas, 
hacia el imperturbable final.