Las palabras caen
Sin encontrar sentido,
Para qué vivo.
***
Una ventana
Abierta al pasado,
Ya estoy ahí.
***
Deseo el llanto
La lluvia cae,
Yo sonrío.
La poesía es una cuestión de sobrevivencia. Este espacio es para las palabras que me hierven en la cabeza o las que me inspiran cuando voy viajando por este camino llamado vida.
lunes, 26 de junio de 2017
domingo, 25 de junio de 2017
Silencio infectado
Cuando lo que callo es más sonoro que mis palabras,
cuando cada respiración grita la misma idea.
Cuando en las hojas de los árboles,
en la piel que cubre el cuerpo
y el corazón que lo mantiene,
bulle el mismo sustantivo.
Mi silencio que no es callado.
Mi callar que no es discreto.
Mis ganas de arrancar el viento,
de morder a gritos.
Mi ardor que reclama,
que hostiga el descanso.
Ese silencio de mil aullidos,
hecho de alaridos que desgarran la luz,
de cánticos diabólicos a mitad del bosque,
de arañazos detrás de la pared.
Ese es mi silencio,
mi agonía.
Destinada a yacer sin voz,
pero sin nunca poder callar.
Destinada a mirar ciega,
sin dejar de imaginar.
Ese es mi silencio, sin voz,
pero infectado de poesía.
cuando cada respiración grita la misma idea.
Cuando en las hojas de los árboles,
en la piel que cubre el cuerpo
y el corazón que lo mantiene,
bulle el mismo sustantivo.
Mi silencio que no es callado.
Mi callar que no es discreto.
Mis ganas de arrancar el viento,
de morder a gritos.
Mi ardor que reclama,
que hostiga el descanso.
Ese silencio de mil aullidos,
hecho de alaridos que desgarran la luz,
de cánticos diabólicos a mitad del bosque,
de arañazos detrás de la pared.
Ese es mi silencio,
mi agonía.
Destinada a yacer sin voz,
pero sin nunca poder callar.
Destinada a mirar ciega,
sin dejar de imaginar.
Ese es mi silencio, sin voz,
pero infectado de poesía.
miércoles, 7 de junio de 2017
Lamento de un amante
Extraña es la voz de los amantes muertos.
Extraño su tacto buscándose en el viento
Qué queda del amor
cuando uno se ha ido.
Qué queda del dolor
cuando el otro ha partido.
Húmeda es la última lágrima
que no termina de caer,
ni ha de tocar la tierra,
ni el sol ha de disolver.
ni ha de tocar la tierra,
ni el sol ha de disolver.
El eco de la última palabra
susurrada a oídos fríos,
un lamento helado que revive
un lamento helado que revive
toda niebla,
y toda madrugada,
y toda madrugada,
Mas, ¿a dónde ha ido el calor?
¿Qué fue de la caricia,
qué queda en la poesía?
¿En dónde te encuentro, piel amante?
¿A dónde marcho con mis besos?
Eterna es la memoria del instante.
Eterna la plenitud de tus abrazos.
Qué somos ahora,
lluvia, tierra,
mar, estrella.
¿Tanto amor necesita el universo
para girar sus astros?
Qué somos ahora,
lluvia, tierra,
mar, estrella.
¿Tanto amor necesita el universo
para girar sus astros?
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